EL ABC.. Ahí tiene usted… el abceeeee

Ahí tiene usted el abc…eeeeeeeeee

Ahí, había un Kiosco. Si, señoras y señores, un kiosco de prensa, chucherías, bonobús, etc..etc., que desapareció como por encanto.

Y desde luego, no sin susto.

Imaginen las cuatro y poco más de la tarde, cuando el kiosquero estaba siendo visitado por esposa e hija pequeña, de repente, sienten una especie de temblor.

Por fortuna, ya que esto les hace desalojar el pequeño recinto a toda prisa, salvando así la vida.

Y, una vez a salvo unos cuantos metros más allá, ven como la tierra se traga su medio de vida, literalmente.

Curiosamente, en algunos medios hablan de «evitar heridos». Y yo considero que es absurdo especular con «heridas» en tamaña caída.

Especulaciones o no, ahora se barajan los dimes y diretes, que si una filtración, que las prisas no han tenido nada que ver, y bla, bla, bla.

Y para más inri, comienzan a sacudirse las pulgas, tratando de quitar hierro a la cosa.

Y la noticia más descalabrante fue, que en el interior del Kiosco se encontraba un billete de lotería de Navidad, con el número 24.140 que se fué al abismo con el abc.

¡Que vergüenza!

Entiendo que unas obras de tantísima importancia, no pueden permitirse fallos de éste tipo.

Y esto es, el ABC de los despropósitos. Que ya hemos tenido oportunidad de ver en muy distintas ocasiones, y diferentes desgracias.

Porque ya estamos hartos de ver, cómo se lavan las manos cuando ocurren este tipo de desastres. Y, normalmente, suelen ocurrir por negligencias humanas. Ya sea en política, o cualquier administración que sea responsable de velar porque las cosas se hagan bien. Bien, pero textual e implícitamente.

Pero, si se pudiera saber lo que se cuece en los despachos, otro gallo les cantaría a determinados chupópteros.

Hay que depurar responsabilidades, y que no se conoforme el ayuntamiento con decir que le instalará un Kiosco al bueno de Juan Ariza -así se llama el propietario del kiosco- .

Ni la Junta con pedir calma. ¿Pero que calma, si estuvieron a punto de sufrir fatales consecuencias tres personas?

Es vergonzoso, deshonesto, inmoral, obsceno y unos cuantos adjetivos más, el modo en que se excusan los políticos. (ahí tiene usted el abc)

«Los técnicos, que afirman esto «no se podía prever» y que descartan que las «prisas» en los trabajos de la línea 1 hayan influido…

…lo rellenaron ayer con mortero para impedir que aumentara de tamaño, por lo que la Junta pide «tranquilidad»…» escriben en un medio.

«El teniente de alcalde Antonio Rodrigo Torrijos, que también llegó al lugar a las siete de la tarde, eludió hacer declaraciones…

…minutos después de que una grúa de grandes proporciones fallara en el primer intento de sacar el quiosco del socavón, ya que el cable que lo asía se soltó» …publican sin cortarse un pelo en otro.

Esto es demasiado. ¿Cómo se pueden hacer obras subterráneas, de la envergadura de toda una red de metro, y no tener previsto este tipo de contingencias?

Cuando, hace ya un par de décadas -mas o menos- se «enterraron» cientos de millones de las añoradas pesetas, para acabar diciendo que era una obra inviable.

¿Por qué? porque Sevilla tiene multitud de riachuelos suburbanos.

Sencilla y llanamente. Sin anestesia ni nada. ¡Para tirarse de los pelos…o no?

¿Qué les parece?

De modo que ¡cuidado! no vayan a un kiosco, y cuando pidan su periódico al kiosquero escuchen esto:

«buenos días con Carlos, ahí tiene usted su ABCeeeeeeeeeee….»

y, perplejo, se quede don Carlos con la mitad del periódico en la mano, pues es lo único que el solícito vendedor tenía para agarrarse.